Los setos son, probablemente, las especies más comunes en los jardines. Esto se debe a que su función no es solo adornar, sino que nos resultan útiles para otras cosas. Con los setos, podemos organizar los distintos espacios de nuestro jardín sin introducir ningún elemento artificial. Además, los utilizamos para cercar nuestra propiedad y así tener privacidad.
En Os das árbores somos especialistas en arboricultura, poda, jardinería y paisajismo en Ponteareas . Por ello, sabemos lo fundamental que es mantener los setos en buen estado si queremos lucir un jardín perfecto. Hoy te contamos algunos trucos para conseguirlo.
Consejos para cuidar de tus setos
El cuidado de los setos es un aspecto fundamental del mantenimiento de un jardín. Como mínimo, debemos podarlos 2 veces al año, aunque es recomendable hacerlo más. De otra forma, causaremos que pierdan forma, se ensanchen demasiado, envejezcan y pierdan hojas.
El cuidado de estas plantas depende mucho de su edad y especie, pero desde Os das árbores, especialistas en poda y jardines en Ponteareas, te damos unos consejos generales:
Poda
Podar nuestros setos es la acción más básica e importante del mantenimiento. La poda no es igual en todos los casos: depende de la especie del seto, de si es joven o viejo… Algunos trucos para saber cómo y cuándo podar tu seto son:
- Si tus setos son de hoja caduca necesitan, mínimo, dos o tres podas al año.
- Si tus setos son de hoja perenne y no crecen demasiado, podrías mantenerlos con una poda al año.
- El momento del año para podar tus setos es cuando los brotes estén maduros. En general, febrero-marzo es buen momento para una primera poda, mientras que finales de agosto y otoño son buenos momentos para una segunda o tercera poda.
- Elige un día en el que el cielo esté nublado, pero que no haya humedad (lluvia, heladas…).
- Cuánto más fuerte sea la poda, en general con más fuerza y vigor crecerá el seto. Pero cuidado, esto no es así para todas las especies. Algunas, como las coníferas, se verán debilitadas con una poda profunda.
- Un seto viejo se reconoce porque se anchea, pierde forma y se vacía por dentro. Si tu seto está viejo, puedes hacer una poda de renovación (cortar las ramas de forma profunda en invierno, para que rejuvenezcan con la primavera) o directamente una poda radical: cortamos el seto cerca de la parte más ancha del tronco, y crece casi desde cero.
Riego
El riego es otro aspecto fundamental del cuidado de nuestros setos. Durante los primeros dos años de vida del seto, es muy importante que lo reguemos con frecuencia, ya que sus raíces todavía no son profundas y podría ser víctima de la sequía.
Como con todas las plantas, la regla para regar es simple: al atardecer en verano, por la mañana en invierno. Se hace de esta manera para evitar que el agua se evapore en los meses más calurosos, y que se hiele en los más fríos.
Evitar la fitóftora
También llamada la enfermedad de los setos, es un problema muy frecuente en los jardines. La fitóftora es un hongo que se transporta a través del agua y entra por la raíz. Sus síntomas son el amarillamiento de las hojas, que se van secando, hasta que eventualmente la planta muere.
Su causa suele ser el exceso de riego, o bien que el suelo no drena bien el agua. Para evitar esta enfermedad debemos:
- Escoger un suelo con un buen drenaje
- Fertilizar frecuentemente la planta
- Evitar riegos excesivos
- Podemos utilizar un abono de fosfato potásico, que aumenta las defensas de las plantas.
Como ves, cuidar de tus setos requiere de cierta dedicación. Si tienes un jardín y quieres que un profesional te asesore o te haga el mantenimiento necesario, no dudes en contactar con Os das árbores. Somos profesionales apasionados de la arboricultura en Ponteareas, estaremos encantados de ayudarte.